¿Qué es la portabilidad financiera y cómo funciona?

Si deseas lograr mejores condiciones de una transacción bancaria, crédito u otro producto contratado, la portabilidad financiera representa una opción viable al momento de aspirar tener mejores tasas o precios. Es un instrumento útil que te permite obtener beneficios tras evaluar diferentes alternativas presentes en el mercado. 

Para ahondar en el tema, aquí te explicaremos con más detalles algunos aspectos relevantes que debes conocer antes de acceder a este tipo de servicio. 

¿Qué es la portabilidad financiera?

Es un proceso regulado por la Ley que facilita a todas las personas que tengan contratados productos o servicios financieros, como cuentas corrientes, tarjetas de crédito y débito, créditos de consumo, hipotecario y automotriz, la posibilidad de cambiarse de entidad bancaria en el menor tiempo posible y con un menor costo para el cliente. Todo ello, siguiendo un modelo similar al empleado en la portabilidad numérica utilizado en la telefonía móvil.  

Con esta herramienta, puedes solicitar la portabilidad de uno, de varios o de todos tus productos. No hay límite máximo de solicitudes. Por lo tanto, tienes la ventaja de hacerlo todas las veces que lo requieras. 

Entre las entidades financieras consideradas para la portabilidad, se encuentran:

• Bancos.
• Compañías de seguros.
• Agentes administradores de mutuos hipotecarios endosables.
• Cooperativas de ahorro y crédito.
• Cajas de compensación.
• Instituciones que coloquen fondos de manera masiva (por ejemplo, empresas que otorgan créditos automotrices).
• Emisores de tarjetas.

Es importante destacar que la portabilidad no es la única forma de realizar el trámite para cambiarse de una institución a otra. También se puede efectuar el refinanciamiento del crédito solicitando el prepago a la actual entidad financiera y luego enviándolo a la nueva donde te quieres portar, una fórmula que en muchos casos resulta más rápida. 

Ley de Portabilidad Financiera 

La ley de Portabilidad Financiera comenzó a regir en Chile el 8 de septiembre de 2020. Tiene por objetivo facilitar el cambio de los productos financieros vigentes de una entidad a otra, disminuyendo los costos y el tiempo de los trámites; lo que  aumentará la competencia en el mercado. 

Por otra parte, se entrega mayor información que permite al cliente comparar y contratar productos o servicios financieros con mejores condiciones comerciales.

Beneficios de la portabilidad financiera

Esta Ley facilita el refinanciamiento de todo tipo de crédito, lo que permite disminuir los costos que pagan las personas a raíz de sus deudas. Así, los consumidores pueden cambiarse con mayor facilidad desde el instituto financiero vigente a otro que le ofrezca condiciones más convenientes. 

Con la portabilidad financiera se disminuye el costo y el número de trámites asociados al refinanciamiento de un crédito automotriz, hipotecario o de consumo. Por ejemplo, en el caso de los créditos automotrices, los ahorros debieran fluctuar entre $250.000 y $1.000.000 dependiendo del monto del crédito, la cantidad de cuotas por pagar y las condiciones del refinanciamiento. 

Esta Ley también disminuye los costos de financiamiento para las micro y pequeñas empresas, lo que permite expandir su producción y contribuir al crecimiento económico, así como a la creación de más puestos de trabajo.

Por otro lado, se espera que con esta Ley aumente la tasa de refinanciamiento. Por ejemplo, en México se aplicó una reforma similar en la que subió de 1,6% a 14,3% en dos años. 

¿Qué debo hacer para portarme?

Tienes dos opciones para realizar el proceso de portabilidad:

1.- Puedes seleccionar un banco o institución financiera a la que quieras cambiarte y solicitar tu portabilidad, la cual se contactará con tu banco actual donde tienes contratados tus productos, es decir tu proveedor inicial. Así, el proceso se lleva adelante entre ambas entidades y no tienes que preocuparte de nada más, sino de recibir la confirmación

2.- Puedes solicitar tu certificado de liquidación en donde actualmente eres cliente, llevarlo al banco o institución financiera a la que quieras cambiarte e iniciar el proceso. Este documento es gratuito y contiene un listado con el detalle de todos tus productos, las tasas, comisiones y el valor total de tus créditos, entre otros. 

¿Cuáles son los plazos de la portabilidad financiera? 

1.- Oferta de portabilidad: Tiene una duración mínima de 7 días hábiles.   

2.- Solicitud de portabilidad: Tiene una vigencia de hasta 30 días hábiles.

3.- Contratación de productos y servicios financieros: La vigencia la establece la nueva entidad financiera. 

4.- Aceptación de oferta de portabilidad financiera: Según la fecha de la solicitud de portabilidad, durará hasta 30 días hábiles. 

5.- Cumplimiento del mandato de término: El plazo para efectuarlo es no mayor a 6 días hábiles bancarios.

¿Cómo se hace la Portabilidad Financiera? 

Si deseas refinanciar tu crédito automotriz con Crediautos, debes seguir los siguientes pasos: 

Entra a nuestro formulario aquí: 

Pincha el botón “Solicita aquí”, ingresa tus datos. Recuerda que debes tener a mano tu cédula de identidad y el número de patente del vehículo que quieres portar, y nuestros ejecutivos se pondrán en contacto contigo.

Es importante que obtengas tu certificado de liquidación, el documento que detalla todos los productos financieros que tienes, junto con la tasa, las comisiones y el valor del prepago del crédito. 

Una vez realizada esta solicitud de portabilidad, te entregaremos una oferta.  Si la aceptas, ¡ya está! Nosotros nos seguimos encargando del resto.

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